Para empezar, debes saber que los cepillos de dientes son uno de los objetos cotidianos más difíciles de reciclar. Están hechos principalmente de plástico (el mango), pero también tienen otros componentes como las cerdas de nailon y las pequeñas grapas que sujetan la cabeza. Esta combinación de materiales diferentes hace que los cepillos de dientes usados sean residuos no reciclables, al igual que los bastoncillos de algodón. Por lo tanto, deben ser desechados directamente en la basura doméstica, como en una bolsa de basura de 10 litros, a menos que se depositen en un punto de recogida.
La empresa TerraCycle y la marca Signal se han asociado para ofrecer una solución para estos desechos denominados "complejos". Esta solución consiste en instalar puntos de recogida dedicados a disposición de los ciudadanos. Estos puntos de recogida permiten recolectar cepillos de dientes usados, así como tubos de pasta de dientes vacíos. Esta solución aún no se ha desplegado en todo el territorio. Para saber si tienes un punto de recogida cerca de ti (punto de recogida público · TerraCycle).
Una vez reciclados, estos cepillos de dientes usados se transforman en gránulos de plástico, mientras que los envases flexibles de los tubos de pasta de dientes se convierten en materiales aglomerados. Estos materiales reciclados pueden luego utilizarse en procesos de moldeo para fabricar mobiliario urbano o materiales de construcción.
Han surgido algunas alternativas a los cepillos de dientes de plástico convencionales, ofreciendo opciones más duraderas y ecológicas.
Entre ellas, los cepillos de dientes de bambú son particularmente populares. El bambú es un material natural y biodegradable, por lo que optar por un cepillo de dientes de bambú permite reducir significativamente los residuos plásticos debido a la producción de cepillos de dientes convencionales. También puedes encontrar cepillos de dientes de madera, que también son biodegradables. Dicho esto, solo el mango de estos cepillos de dientes es biodegradable y puede añadirse a tu compost. Debes quitar todas las cerdas de nailon y las grapas, que no son compostables.
Otra solución es optar por cepillos de dientes con cabezales intercambiables, que constituyen una solución ingeniosa para reducir los residuos. En lugar de desechar todo el cepillo, solo se reemplaza la cabeza usada, prolongando así la vida útil del mango. Algunas marcas, como Apimani, incluso te ofrecen reciclar tus cabezales de cepillos de dientes usados en puntos de recogida. ¡Probablemente la alternativa más ecológica!
Antes de pensar en desechar tu cepillo de dientes usado, debes saber que existen muchas formas de reutilizarlo. Por ejemplo, puedes utilizarlo para limpiar superficies. Los cepillos de dientes pueden ser herramientas muy prácticas para limpiar rincones y grietas difíciles de alcanzar, como las juntas del baño. Prepara una mezcla de vinagre blanco y jugo de limón, sumerge tu cepillo de dientes unos segundos en esta mezcla y luego frota las superficies para devolverles el brillo en poco tiempo.
También puedes usar estos cepillos de dientes para quitar el polvo de tus dispositivos electrónicos. Siempre con la idea de limpiar zonas de difícil acceso, puedes usar tus cepillos de dientes usados secos para quitar el polvo de los teclados de computadora o consolas de videojuegos.
Los cepillos de dientes de plástico no pueden tirarse en el contenedor amarillo de reciclaje. Sin embargo, existen puntos de recogida específicos que siguen siendo la mejor opción. Y antes de desechar tu cepillo de dientes usado, no olvides que puede tener una segunda vida útil más allá del cepillado diario de dientes. Desde la limpieza de dispositivos electrónicos hasta pequeños objetos metálicos, ofrece una solución práctica y ecológica para reutilizar un producto que a menudo se desecha prematuramente.
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