TRUCOS Y CONSEJOS
Se sabe desde hace tiempo que la eliminación de las pilas usadas es un asunto delicado y requiere mucha atención. Los juguetes de los niños, los mandos a distancia de la televisión, etc. son algunos de los dispositivos cotidianos que utilizan pilas. En los últimos años ha aumentado el número de centros de clasificación y se ha desarrollado la forma de reciclar las pilas para poder reutilizar los materiales que contienen.
En los últimos años el uso de las pilas se ha reducido notablemente respecto a unas décadas atrás, pero su uso todavía sigue siendo más común de lo que parece, y a veces se nos olvida que su vida no es infinita. Por ello, necesitamos saber qué podemos hacer con ellas una vez se hayan agotado.
A pesar de que puede parecer una pregunta fácil de responder, a veces cometemos el error de introducir en el propio contenedor algo que no corresponde:
Después de la recogida, hay dos métodos principales de reciclaje según el tipo de pila:
Pirometalurgia, o reciclaje térmico. Este método afecta a las pilas alcalinas/salinas, las pilas de litio, las pilas de NiCd, las pilas de iones de litio y las pilas de NiMH y se realiza en dos etapas: las pilas se tratan primero mediante un proceso de fusión en un horno entre 450° y 1500° para homogeneizar las fuentes metálicas. A continuación, las pilas se someten a una reacción redox que permitirá la separación final de los diferentes metales sin excepción para ser finalmente refinados y reutilizados.
Hidrometalurgia, o proceso de líquidos ácidos. Este método es adecuado para pilas alcalinas/salinas, NiCd y Li-ion. Las pilas se someten a un tratamiento físico-químico con ácido para separar los materiales férricos y no férricos, así como el papel y los plásticos. La ventaja del tratamiento hidrometalúrgico de las pilas es que permite recuperar el zinc, el manganeso, el cobalto, el litio y el níquel.
Los metales que se pueden recuperar son :
Estos metales pueden reutilizarse para fabricar diversos objetos, como llaves, ollas y sartenes, piezas de fontanería o piezas metálicas para la industria del automóvil y la aeronáutica.
Por último, no podemos recomendar una forma mejor de reducir el consumo de baterías que utilizar baterías recargables, conocidas como baterías de NiMH y NiCd. Introducidas en el mercado hace unos años, aún no han conquistado a la mayoría de los consumidores, a pesar de que su rendimiento y eficiencia son ahora iguales a los de las baterías tradicionales, lo que las convierte en una excelente solución para minimizar el consumo de baterías en la vida cotidiana.
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